Angels & Demons (2009-Ron Howard)

Angels & Demons (2009-Ron Howard)

(Ángeles y Demonios)

Mi opinión: 7 / 10

Luego del éxito que supuso El código Da Vinci para su autor Dan Brown, lo natural fue que Hollywood se lanzara como tiburón sobre la novela y la llevara al cine. Desconozco, pero imagino que el trato incluyó filmar otras novelas de Brown, cuya consecuencia es este film.

Angels & Demons se ambienta en Roma, pero más precisamente en el Vaticano. El papa ha muerto y un concilio debe elegir a su sucesor. Pero el día en que éste debe reunirse, un pequeño contenedor con 1 gramo de antimateria es robado del CERN en Suiza. El ladrón comete la doble proeza de ocultarlo en el Vaticano y amenazar con volar la ciudad, a la vez que secuestrar a los cuatro papabiles (es decir, los candidatos con más posibilidades) y en una macabra cuenta regresiva, matarlos de a uno, hora por hora, hasta que con la quinta hora, coincidente con la medianoche, el contenedor estalle con una carga equivalente a 5 Kilotones, y haga desaparecer de la faz de la tierra a la sede pontificia y parte de la misma Roma.

Ayelet Zurer y Tom Hanks

¿De qué va Robert Langdon (Tom Hanks), el héroe del Código Da Vinci, en esto? Bueno, el ladrón / asesino actúa en nombre de una antigua organización secreta enemiga de la Iglesia, los Illuminati. Y solo Langdon tiene la llave para los mensajes encriptados que envía. El será quien pueda detener al asesino y evitar el desastre.

Angels & Demons es bastante diferente de su predecesora fílmica. Y lo es porque la novela también es diferente. Antes que nada, Brown la escribió tres años antes que El Código Da Vinci, pese a ser filmada (con toda lógica) después. Y sobre todo carece del mismo elemento “aventura”. Más bien, se trata de una novela sobre enigmas y cómo descifrarlos. Y eso inevitablemente se traslada a la película. Pese a los esfuerzos de Ron Howard por darle ritmo, la acción se remite a unos pocos lugares y hay más dialogo que movimiento. Por otra parte, esta vez no hay tantas figuras en el reparto. De todas, la que más tiene un rol preponderante es Ewan Mc Gregor, como el camarlengo del Papado, una especie de secretario del pontífice muerto que lleva adelante la organización de la transición, pero cuya posición no le da el poder real para conseguir ordenar las cosas. Su contraparte es el Cardenal Strauss (Armin Mueller-Stahl), el gran elector del concilio que se opone a las presiones del camarlengo; Del resto, todo el mundo cumple un rol importante pero sin tanta pantalla: el Jefe de la Guardia Suiza (Stellan Skarsgård), no muy convencido de Langdon pero trabajando para evitar los crímenes; el inspector Olivetti (Pierfrancesco Favino), quien hizo traer a Langdon, y la doctora Vetra (Ayelet Zurer), científica del CERN, que en el film tiene mucho menos preponderancia que en la novela, donde es la coprotagonista. Y no me olvido del asesino (Nikolaj Lie Kaas).

Stellan Skarsgård y Ewan Mc Gregor

Armin Mueller-Stahl (al centro)

Cada uno de todos ellos (Tom Hanks incluido) cumple su papel con corrección. La ambientación nos hace recorrer el Vaticano y las calles de Roma, aunque las horas nocturnas nos hacen perder parte de la belleza de esa antigua ciudad.

Angels & Demons no termina de despegar como thriller. Y tampoco saca partido de la historia de las conspiraciones, los Illuminati, la represión de la iglesia medieval contra la ciencia. Brown había hecho un combo medianamente interesante en su novela que aquí el guion desaprovecha. Y si bien la película tiene por momentos cierta intensidad, por otros se pierde en un laberinto de personajes. Ojo, tampoco se trata de decir que es un mal film. Howard es un director con la suficiente experiencia para sacarle el jugo a sus actores y a la trama. Pero indudablemente hacer una saga de películas con Robert Langdon no tiene el mismo efecto que, por ejemplo, con Indiana Jones. Y es que aunque ambos son profesores universitarios, sus métodos son radicalmente diferentes. Difícilmente Langdon vuelva a protagonizar una aventura tanto o más excitante como la que tuvo en el Código Da Vinci. Lo que no es obstáculo para ver y disfrutar Angels & Demons.